Palpitar

Mi corazón palpita por ti, por tus más de mil razones, palpita por tu hermosura, por tu dulce mirada, palpita fuerte cuando te sueño, palpita tranquilo cuando a tu lado estoy, palpita emocionado cuando llega la hora de verte. Palpita por tu sonrisa, por tus sonrojadas mejillas y por tus tiernas manos, palpita ansioso cuando te veo caminar a lo lejos, palpita de regocijo cuando contigo charlo y palpita triste cuando no te puede ver. Palpita por tu aroma, también por cuerpo, palpita por conocer más de tu conocimiento, palpita incesante por estar cerca de ti, palpita lento cuando te vas, pues el tiempo a tu lado vuela, como si no fuera suficiente nunca, pero lejos transcurre lento en una incesante agonía. Pero al final del día, del minuto, del segundo, del siglo, del año el sentimiento es el mismo, pues con imaginarte princesa, mi corazón palpita feliz.

Siempre creeré en ti

Creer en ti

Creer, es en muchos sentidos una de las líneas más delgadas que existen, y algo más preocupante que pasarla es romperla, sí se rompe la creencia se están perdiendo muchas otras cosas, se pierde confianza, se pierde el acercamiento, se pierde la misma esencia, y sin embargo es eso mismo lo que me impulsa a seguir.

Cuando pienso en cada error cometido también pienso en como arreglarlo, ¿es difícil arreglar que una persona crea en ti después de haberle fallado? sí, lo es, más no imposible. En mi particular caso únicamente hay que recordar, y una vez recordado no hay que olvidar. Hay que recordar justamente, la esencia.

La esencia de Anndy es, sin duda alguna, la más hermosa del mundo, la esencia trasciende cualquier complicación, pero únicamente si esa esencia viene de alguien tan maravillosa, la esencia es personal, única e intransferible, pero también es inspiradora a tal grado de hacer cosas que se pensaron imposibles.

Para alcanzar la luna la razón nos pondrá mil obstáculos y sin embargo, el haber conocido la esencia de una persona increíble me hace asegurar que, creer puede hacer que la luna esté al alcance de los dedos, que la lava sea fría, que se intente lo que sea una y otra vez, pero este intento debe ir lleno de convicción, pues de lo contrario sería vacío.

Y, Anndy, tú no eres vacío, tú no eres un objeto, eres mucho más que lo que las palabras pueden explicar y por eso te digo, que rendirse no es una opción para el cariño. Soñando Contigo - Saurom